Luego de la molestia por lo que consideraron como una exclusión durante los actos del Bicentenario, numerosos gauchos y otros tantos ciudadanos se congregaron espontáneamente este jueves por la tarde en el monumento al Gral. Martin Miguel de Güemes.
Allí los asistentes se organizaron, pidieron a los asistentes correr los autos estacionados y finalmente cumplieron con la tradición, desfilando por ante la estatua que inmortaliza al héroe gaucho.
Primero los asistentes entonaron el himno nacional, luego el himno a Güemes y como corolario desfilaron a pie y a caballo, pudiendo finalmente ingresar a la zona vallada a los pies del monumento.
El malestar del gauchaje se evidenció el miércoles por la noche, cuando no se les permitió encender fogones y se les impuso exigencias en torno al tiempo de cada uno en la guardia bajo las estrellas.
El enojo terminó de explotar cuando vieron la cantidad de militantes kirchneristas ingresar al monumento, cuando muchos de sus compañeros no habían podido pasar por no tener identificación o acreditación.
Por ello se retiraron del acto y finalmente, ya el jueves por la tarde,coincidieron en volver de forma espontánea para presentar sus respetos al héroe nacional.
Las imágenes se viralizaron rápidamente, generando mayormente comentarios a favor de la actitud adoptada, de desfilar por fuera de los actos protocolares.