Todos los casos fueron leves sin revestir mayor gravedad.
Se trató de un chico de 14 años y otros de 10, 5 y 3 años.
En general presentaron quemaduras por mal uso de pirotecnia en manos y ojos, aunque leves.
Pese a la ordenanza que prohíbe la pirotecnia sonora, en Salta se advirtió mayor ruido en año nuevo que en navidad, ya que muchos hicieron caso omiso a esa prohibición.