Se trata de un pórfiro de oro y plata ubicada en Salar de Arizaro, departamento Los Andes.
El martes 20 de octubre de 2020 se produjo el primer vertido de oro de la mina lo que constituyó un hito para la minería argentina, produciéndose 728 onzas de oro.
La empresa invirtió 440 millones de dólares en el proyecto, en las fases de exploración, preconstrucción, construcción y preproducción. Se prevé una inversión de US$ 26.300.000 para el 2022.
La empresa genera casi 600 empleos directos, más del 70% originarios de la Provincia de Salta. Además cientos más en forma indirecta, lo que implica un fuerte impulso al desarrollo económico-social de la región.
Se destacan las acciones de sostenibilidad de la empresa en temas de seguridad, medio ambiente y desarrollo humano con las comunidades de Tolar Grande, Pocitos y San Antonio de los Cobres.