A través de un extenso comunicado, firmado por monseñor Mario Antonio Cargnello, el arzobispado de Salta comunicó a la feligresía salteña el cambio en el cronograma de los cultos al Señor y la Virgen del Milagro.
En lo que respecta al día 15, jornada de la tradicional procesión, que este año está suspendida, se anuncia que se sacarán a las imágenes a recorrer la plaza 9 de julio, renovándose el Pacto de Fidelidad una vez completado ese mini recorrido, frente al atrio de la Catedral.
Se aseguró que todos los cultos del Milagro serán transmitidos por distinos medios de comunicación y a través de diferentes plataformas para que puedan ser accesibles a la feligresía en general , en especial al recorrido que se hará el día 15, al cual no se nombró como procesión, sino como rezo del Santo Rosario y Renovación del Pacto de Fidelidad.
El comunicado
La parte central del comunicado, respecto del día 15 de setiembre dice lo siguiente:
- El15 de septiembre, Solemnidad del Señor del Milagro, a hs. 17,00 las imágenes del Señor, de la Virgen del Milagro y de la Virgen de las Lágrimas saldrán a la calle para respetar el mandato histórico.
Esto se hará sin participación de fieles. Sólo estarán las siguientes autoridades civiles: el Señor Gobernador de la Provincia, la Sra. Intendente de la Ciudad, el Señor Vicegobernador, el Señor Presidente de la Cámara de Diputados y el Señor Presidente de la Corte de Justicia, todos acompañados por sus cónyuges. Estarán también un grupo de sacerdotes, religiosos y algunos laicos.
Las imágenes serán trasladadas alrededor de la Plaza 9 de Julio por miembros de la Hermandad del Señor del Milagro.
Al finalizar el rezo del Santo Rosario celebraremos el Pacto de Fidelidad y, luego de entonar el Himno Nacional Argentino, serán llevadas nuevamente al interior de la Catedral.
Ruego al Señor que ésta sea una oportunidad para renovar el pacto desde el corazón mismo de la familia, santuario del amor, de la vida, de la libertad y de la dignidad. Él nos concederá la gracia de crecer en el deseo del encuentro para que el próximo año celebremos unidos este paso del Señor que, aunque nos desconcierta, sabemos que Él está haciendo grandes cosas, aunque no lo comprendamos y debamos guardarlo en el corazón, como nos enseña la Santísima Virgen.