Se trata de una acción complementaria a las que se ejecutan en la zona declarada en emergencia sociosanitaria por el Gobierno de la Provincia.

Los trabajos se realizarán con maquinaria y profesionales de ambos organismos, a partir de la recuperación de dos perforadoras de la Secretaría de Recursos Hídricos, organismo que se ocupará de la construcción de los pozos. El Ministerio de Infraestructura tendrá a su cargo la colocación de filtros, caños y de la instalación en superficie.

De los Ríos estimó que la obra para el primer pozo comenzaría en Carboncito, para continuar luego por la franja donde -se sabe-  hay agua dulce no profunda.

El funcionario indicó que esto se realizará con recursos del Gobierno provincial, lo que según los planes les permitiría perforar 10 pozos hasta fin de año.

Estos pozos someros tendrán una profundidad aproximada de entre 60 a 80 metros y no necesitarán infraestructura de envergadura como la que se utiliza para los que se construyen en zonas del departamento Rivadavia, que llegan a los 230 metros.

Camacho indicó que esta es una acción complementaria a las encaradas por el Gobierno provincial porque “no hay una única solución al problema de abastecimiento de agua segura a las comunidades originarias y criollas”.