Teniendo como principio primordial promover la participación ciudadana y garantizar el ejercicio democrático a través del diseño y ejecución de políticas públicas mediante la implementación de mecanismos institucionales. En los apartados de la norma se fijan la Autoridad de Aplicación; la Composición del Consejo y funciones; como así también características de la convocatoria para integrar dicho espacio; entre otros puntos.
Al referirse a los objetivos de la iniciativa, Benavidez indicó: “Busca la reconstrucción de las juventudes que tiene olvidada la ciudad”. Con posterioridad otorgó detalles vinculados a su articulado.
El Consejo está definido como órgano autónomo de asesoramiento y coordinador de acciones entre el Departamento Ejecutivo Municipal y el Concejo Deliberante. Estará integrado por quince jóvenes entre 16 y 30 años de los siguientes sectores: cinco de centros de estudiantes, de los cuales tres son de universidades públicas y privadas e instituciones terciarias del nivel superior y dos de instituciones del nivel secundario; cinco de organizaciones no gubernamentales que trabajan con jóvenes de la Ciudad; y cinco de asociaciones, centros vecinales, agrupaciones culturales y fundaciones. Además, se enumeran las funciones que tendrá el Consejo, entre los que se encuentran: remitir sugerencias, críticas, inquietudes y propuestas al gobierno municipal, en cualquiera de sus áreas; fomentar la participación de los jóvenes y la integración de los distintos sectores que conforman dicho Consejo; emitir dictámenes sobre temas relacionados a la juventud y elevar informe a la Autoridad de Aplicación; y promover y favorecer el desarrollo de iniciativas de los jóvenes no integrados a ninguna organización de la sociedad, entre otras tareas.
Se estipula también que el Consejo se reunirá al menos una vez al mes y, de forma extraordinaria, cuando la situación así lo amerite. Consignando que el trabajo de quienes lo integren es ad honorem y obtendrán un diploma de reconocimiento por su labor social al servicio de la ciudad de Salta.
En uno de los apartados se hace referencia a que el DEM y el CD designarán, cada uno, a dos representantes, quienes actuarán como miembros observadores y coordinadores, con voz y sin voto, en las sesiones. Serán a su vez interlocutores con los órganos de gobierno municipal en cuanto a los requerimientos o necesidades que se presenten en su funcionamiento.
La redacción también prevé que la Autoridad de Aplicación será la Secretaría de Juventud y Deportes o el organismo que en el futuro la reemplace, estableciendo las funciones que tendrá la misma. Asimismo se fija que el DEM deberá dar a conocer, a los sesenta días de promulgada la norma y por los distintos medios de comunicación, a los interesados en conformar el Consejo de Participación Juvenil, a las organizaciones y asociaciones indicadas, quienes deberán manifestar la voluntad de participar en un plazo de hasta sesenta días desde la realización de la convocatoria.
En la ocasión concejales se manifestaron a favor de la iniciativa. Fue el caso de Romina Arroyo (STF), quien adelantó su acompañamiento señalando: “Es un Proyecto que incluye al joven en la toma de decisiones de la ciudad”. En la misma línea su compañero de bancada, Raúl Córdoba, resaltó la importancia de que las nuevas generaciones participen en las instituciones. Finalmente, Santiago Alurralde (STF) celebró su elaboración, indicando: “Viene a involucrarlos, a hacerlos participes del presente”.
