El imputado fue encontrado autor material y penalmente responsable de los delitos de abuso sexual gravemente ultrajante por la duración agravado por el vínculo, la guarda y la convivencia; abuso sexual con acceso carnal agravado por el vínculo, la guarda y la convivencia, y corrupción de menores agravada, todo en concurso real.

La jueza ordenó que el condenado permanezca alojado en la Unidad Carcelaria 1 y ofició al Servicio Penitenciario para que realice tratamiento psicológico, por la naturaleza de los hechos por los que resultó condenado.

También ordenó que se le realice al imputado examen genético para su posterior incorporación en el Banco de Datos Genéticos, previa asignación por el Registro Provincial de Condenados Vinculados a Delitos contra las Personas y contra la Integridad Sexual. Esto, de conformidad a lo establecido en el artículo 18 de la Ley provincial 7775 y Acordada 12481 de la Corte de Justicia de Salta.
El imputado es padre biológico de la víctima. Los hechos salieron a la luz cuando la madre de la menor descubrió fotos de su hija mayor (14 años) desnuda en el celular de su pareja, A. A. C. Al increparlo, el imputado dijo que la menor se las había dado y que ella lo provocaba. Luego admitió los abusos manifestando que la adolescente “era su segunda mujer”.

La denunciante refirió que su hija tiene un retraso madurativo leve.

En circuito cerrado de televisión, la menor expresó que su padre comenzó a sacarle fotos desnuda y a someterla a tocamientos impúdicos a los 12 años. Contó que cuando ella se resistía, el imputado le pegaba a sus hermanos menores y con esa amenaza abusaba de ella y la obligaba a guardar silencio.